Alumnos procedentes de Marruecos, el sur de Italia y España comparten aula desde hoy y hasta el próximo viernes para asistir al curso de verano que bajo el título "Inmigración y Diversidad: los retos de una sociedad multicultural" han organizado conjuntamento la Universidad de Córdoba y la Fundación para el Desarrollo de los Pueblos de Andalucía. Durante cinco días especialistas en la materia analizarán desde distintas perspectivas que abarcan desde el punto de vista cultural, social, laboral o legislativo, el fenómeno de los movimientos migratorios y su incidencia en la sociedad actual, buscando soluciones que contribuyan a aumentar la convivencia entre las distintas culturas.

El vicerrector de Estudiantes y Enseñanzas Propias de la UCO, Manuel Torres, ha destacado en el acto de apertura la sensibilidad de la Universidad de Córdoba con su entorno y en especial con un fenómeno de gran importancia para la sociedad actual, una sensibilidad que le ha llevado a intentar con este curso "abrir una vía que pueda aportar luz a un problema que preocupa en el sur de España, en el sur de Italia y en el norte de Marruecos, territorios todos ellos unidos por el Mediterráneo".

En el mismo sentido se ha expresado el secretario general de UGT-Andalucía, y presidente de la Fundación para el Desarrollo de los Pueblos de Andalucía, Manuel Pastrana, quien ha hecho especial hincapié en la pecurialidad de un alumnado procedente de distintas riberas del Mediterráneo que, a su juicio, "dotará al curso de unas características especiales mezclando el saber teórico y el análisis con la experiencia práctica de sus alumnos".

Pastrana afirmó que, si bien los datos oficiales cifran en 160.000 personas la población inmigrante residente en Andalucía, datos del sindicato elevan a esta cantidad a 360.000, trabajadores que en su mayor parte no gozan de unas óptimas condiciones de vida. "Esta es una realidad -ha dicho- que hay que atender desde Andalucía desde el ámbito laboral y también desde el ámbito formativo, de ahí el significado y la importancia de este curso, que apuesta por la convivencia en unos momentos en que hay partes de la sociedad que están intentando el desarrollo de políticas que fomenten el enfrentamiento entre el mundo árabe y occidente".

Por su parte, el consejero de Presidencia de la Junta de Andalucía, Gaspar Zarrías, ha asegurado que "el reto de la sociedad en un futuro pasa por saber convivir en sociedades multuculturales, por aprender a ser más libres, a serlo juntos y desde el respeto a la pluralidad". Para Zarrías el abordaje político del fenómeno de las migraciones "debe ir más allá de un mero desarrollo normativo y requiere trabajar desde el ámbito del sentimiento y de la racionalidad". El consejero ha afirmado que es necesario "trabajar en la educación de los sentimientos, pasando por la educación en los ámbitos familiar y escolar".

Paralelamente, Zarrías ha defendido la necesidad de una política de cooperación en el ámbito de la Unión Europea, y una mayor colaboración policial que contribibuya a erradicar "las mafias que representantan a los negreros del siglo XXI", al tiempo que ha apostado por la necesidad del establecimiento de "contratos en origen, con un baremo de las necesidades existentes". Reforzar las plazas escolares y la asistencia sanitaria en aquellos núcleos receptores de población inmigrante es a juicio del consejero de Presidencia una de las labores que está desarrollando la Junta de Andalucía en los últimos tiempos y que, a su juicio, contribuirá a evitar la "sensación de rechazo" entre la población